El Partido Demócrata, que encabeza el presidente de Estados Unidos Barack Obama, se "solidarizó" con Planned Parenthood –acusada de traficar con órganos de bebés abortados en sus instalaciones–, y en cambio exigió investigar a la organización pro-vida que destapó el escándalo, el Center for Medical Progress (CMP, Centro para el Progreso Médico).
El CMP ha difundido dos videos, grabados de forma encubierta por dos actores que fingían ser compradores de órganos, en los que se evidencia que altas funcionarias de la multinacional abortista más grande del mundo, Planned Parenthood, acceden a vender órganos de los bebés abortados en sus instalaciones por sumas entre los 35 y 100 dólares.
En el segundo video, publicado el 21 de julio, la doctora Mary Gatter, Presidenta del Consejo de Directores Médicos de Planned Parenthood Federation of America, negocia la tarifa de la venta de órganos y aseguró que "quiero un Lamborghini", marca de autos de lujo cuyo modelo más económico –el "Huracán" – bordea los 200 mil dólares.
CMP ha anunciado que se difundirán más videos exponiendo a Planned Parenthood, fruto de una investigación realizada durante tres años y titulada "Capital Humano".
En una carta remitida a la Fiscal General de Estados Unidos, Loretta Lynch, y a la Fiscal General del estado de California, Kamala Harris, los congresistas demócratas Jan Schakowsky, Zoe Lofgren, Jerry Nadler e Yvette Clarke exigieron investigar y sancionar al CMP por, entre otras cosas, "filmar secretamente un video de una médico de Planned Parenthood de California y hacer públicas porciones del video sin su consentimiento".