ASUNCIÓN,
La Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP), transmitió su cercanía y consuelo a los familiares de los cinco policías asesinados en los últimos días por el grupo terrorista Ejército del Pueblo Paraguayo, un hecho condenable por ser un "desprecio por la vida humana".
El viernes 17 de julio tres policías fueron hallados muertos en un camino rural a 250 kilómetros al norte de Asunción. Este hecho sucedió a menos de 25 kilómetros del lugar donde el domingo 12 fueron acribillados otros dos policías.
En rueda de prensa, el ministro del Interior, Francisco de Vargas, atribuyó ambos ataques al Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), grupo terrorista de ideología marxista que desde hace más de un año tiene secuestrado al suboficial de la Policía, Edelio Morínigo.
En un comunicado difundido este lunes, la Oficina de Prensa del Episcopado informó que los obispos expresaron "su consternación, dolor e indignación" por estos asesinatos que "enlutan a toda la ciudadanía y contradicen el mensaje de tolerancia, respeto y necesidad de diálogo que nos entregó" el Papa Francisco en su reciente visita al país.
"La Iglesia condena la violencia, el ensañamiento y la irracionalidad demostrada por los autores de los asesinatos y les hace un llamado firme: ¡Basta de violencia y de odio! ¡Cesen de matar a sus hermanos! La sangre derramada clama a Dios desde la tierra", expresaron los obispos, que elevaron oraciones por los fallecidos y sus familias.