QUITO,
Como última actividad de su viaje a Ecuador, el Papa Francisco visitó el Santuario de Nuestra Señora de la Presentación del Quinche, patrona del país, donde dejó de lado el discurso oficial e improvisó un mensaje para exhortar a consagrados y sacerdotes a no caer en el "Alzheimer espiritual" y recordarles que la vocación es un servicio que se ejerce siempre de manera gratuita.
Francisco llegó al santuario mariano luego de una breve visita al Hogar San José, uno de los dos albergues de ancianos que las Misioneras de la Caridad tienen en Quito. Luego de rezar ante la imagen mariana y colocarle un rosario en una de sus manos, salió al atrio donde dejó de lado el discurso oficial para brindar a sacerdotes, religiosos y consagrados los siguientes consejos:
1. Sigan el ejemplo de María
"María no protagonizó nada, 'discipuleó' toda su vida". Fue "la primera discípula de su Hijo y tenía consciencia de que todo lo que ella había traído al mundo era pura gratuidad de Dios, consciencia de gratuidad".
2. Son religiosos porque Dios los llamó
"Ustedes no pagaron entrada para entrar al seminario, para entrar a la vida religiosa. No se lo merecieron. Si algún religioso, sacerdote o seminarista o monja que hay aquí cree que se lo mereció que levante la mano. Todo gratuito. Y toda la vida de un religioso, de una religiosa, de un sacerdote y de un seminarista que va por ese camino (…) de la gratuidad". Por eso, "antes de irse a dormir, una mirada a Jesús y decirle: 'Todo me lo diste gratis'".