ASUNCIÓN,
El caso de una niña de 10 años embarazada víctima de una violación, que saliera a la luz pública a fines de abril de este año, ha sido manipulado por ONGs promotoras del aborto en Paraguay, denunció la madre de la menor, quien confesó haber sido engañada por estas organizaciones.
El caso de la niña, cuya identidad –al igual que la de su madre– ha sido mantenida en reserva por seguridad, ha despertado una fuerte polémica en Paraguay. El gobierno del país, manifiestamente pro-vida, ha recibido presiones de la organización promotoras del aborto como el Comité de América Latina y el Caribe para la Defensa de los Derechos de la Mujer (CLADEM) y Amnistía Internacional.
En una carta difundida a través de sus abogadas, la madre de la menor denunció que "diversas personas e instituciones que no están precisamente interesadas en mi suerte, casi diariamente solicitan la firma de escritos panfletarios que sólo benefician a sus intereses sectarios, por más que afirmen que provengan de organismos tan prestigiosos como la ONU o Amnistía Internacional, buscando solamente propaganda para sus respectivas organizaciones, enturbiando cada vez más mi situación procesal".
Ante esta situación, la mujer ha tomado la decisión de "no dar entrevistas a los efectos de evitar que sigan difundiendo versiones distorsionadas de la situación ya de por sí difícil por la que estoy atravesando".
Gualberto García Jones, director ejecutivo de International Human Rights Group y experto en derechos humanos, se reunió hace una semana con Elizabeth Torales Escurra, abogada de la madre de la niña. En esa ocasión, la letrada le confirmó que su defendida se sentía manipulada por las ONGs que promueven el aborto.
En declaraciones a ACI Prensa, García Jones señaló que "la abogada me dijo que (la madre) se sentía manipulada, que esta persona quiere que se proteja tanto a su hija como al bebé, que ella la considera su nieta".