Planned Parenthood, la transnacional del aborto más grande del mundo, encubre sistemáticamente violaciones y esclavitud sexual de menores, al tiempo que realiza prácticas racistas, infanticidas y tiene una "misión de buscar y destruir" a las bebés mujeres en Estados Unidos, según reveló el más reciente informe de la organización pro-vida estadounidense Live Action.
El documento, titulado "Mentiras, corrupción y escándalo" concluye que "en 16 separadas visitas a clínicas durante apenas tres años, las instalaciones de Planned Parenthood encubrieron consistentemente la violación de menores, e instigaron la explotación sexual comercial de niños".
"Cada instalación de Planned Parenthood que Live Action investigó reveló que los trabajadores estaban dispuestos a facilitar el abuso de niñas al proveer abortos secretos", indica el reporte.
"Por ejemplo, una enfermera de Planned Parenthood en Bloomington, Indiana, dijo a nuestra investigadora cómo mentir sobre la edad de su abusador: 'Solo di que lo has visto por ahí; tú sabes, él tiene 14, está en tu grado o lo que sea'".
Live Action reporta que "esta misma enfermera aconsejó a nuestra investigadora que vaya fuera del estado para evitar la ley de consentimiento parental de Indiana".
Con respecto al tráfico sexual de menores, "los proxenetas que explotan comercialmente a niñas pueden encontrar socios naturales en el crimen a través de la industria del aborto".