ROMA,
El Estado Islámico (ISIS) rechazó la oferta para rescatar a los 231 cristianos secuestrados en febrero en el este de Siria y decidirá la suerte de los 52 niños, 84 mujeres y 95 varones bajo la ley islámica (sharia), que, de no ordenar su muerte, quedarán como esclavos.
A fines de febrero de este año, los extremistas islámicos irrumpieron en las 35 villas cristianas asirias ubicadas en los márgenes del río Khabur, secuestrando a unas 254 personas, entre niños y adultos. En los días siguientes liberaron a 23 de ellos y el resto permanece en Raqqa, la capital del autodenominado califato.
Según informó la Iglesia asiria y AINA News (Assyrian International News Agency), el Estado Islámico exigió 100.000 dólares por cada rehén, es decir unos 23 millones de dólares. Sin embargo, no se consiguió esa cantidad y ahora los yihadistas anunciaron que ya no negociarán.
Desde Australia, el obispo Mellis de la iglesia asiria, recordó a SBS Radio en Australia que "somos una nación pobre" y que los secuestrados "no han hecho nada malo y no dañan a nadie".
"Nosotros, como asirios no tenemos esa cantidad de dinero que están pidiendo. Ofrecimos una cantidad de dinero que no podemos revelar en este momento. Con la cantidad que ofrecimos, pensamos que era aceptable para el retorno de las 230 personas. Después de dos días, ellos (Estado Islámico) nos dijeron: la cantidad que la Iglesia ofrece no es aceptable. A partir de ahora, ya no podremos negociar contigo".