ASUNCIÓN,
El gobierno de Paraguay expresó su rotundo rechazo a una campaña que busca que se ejecute un aborto a una niña de 10 años, embarazada tras ser violada por su padrastro, y advirtió que someter a la menor a esta práctica pondría en serio peligro su vida.
La madre de una niña de 10 años en Paraguay pidió recientemente que se someta a un aborto a su hija, embarazada tras ser violada por su padrastro. Las identidades de las dos mujeres son mantenidas en reserva por las autoridades, pero se sabe que la menor se encuentra en la semana 23 de gestación.
La madre de la niña se encuentra actualmente encarcelada acusada de faltar al deber del cuidado de su hija, así como de obstruir a la justicia. El violador está prófugo de la justicia, y pesa sobre él una orden de captura.
Amnistía Internacional ha encabezado la campaña #NiñaEnPeligro para que se someta a la menor a un aborto, y encabeza un pedido de recolección de firmas dirigidas al presidente del país, Horacio Cartes, y al fiscal general Javier Díaz Verón.
Sin embargo, el ministro de Salud de Paraguay, Antonio Barrios, aseguró a inicios de mayo que "el aborto está descartado. Este ministro está en desacuerdo con el aborto".
Además, en una declaración recogida por el diario ABC Color, Barrios indicó que "no hay indicios de que la salud de la niña esté en riesgo".