REDACCION CENTRAL,
San Estanislao de Szczepanowski fue un hombre que asumió su cargo de obispo como el buen pastor que cuida a las ovejas, velando de manera especial por los pobres y enfermos.
San Estanislao nació en Szczepanowski (Polonia) en el año 1030. Sus padres lo consideraban como un regalo de Dios porque no habían concebido un hijo en 30 años de casados. Por ello, le dieron una profunda educación en la vida de fe. Estudió en Polonia y en París, y fue ordenado sacerdote por el obispo de Cracovia.
Se le designó una parroquia y se distinguió por su gran elocuencia. Sus fieles lo consideraban como un ejemplo de santidad debido a su buen comportamiento. Por medio de sus prédicas y la dirección espiritual logró convertir a muchas personas.
Por esas virtudes, el obispo de la ciudad quiso nombrarlo como su sucesor, pero Estanislao se negó porque se creía indigno para el cargo. Cuando murió el obispo en 1072, el pueblo lo aclamó como el más digno para el puesto. El santo ejerció el obispado durante siete años.
San Estanislao fue muy estricto en las exigencias a los sacerdotes. Siempre les pedía que cumplieran con sus deberes y fueran como el Buen Pastor. Todos los años visitaba todas las parroquias y dedicaba horas a la evangelización del pueblo.
Asimismo, acogía en el palacio episcopal a muchos pobres y jamás les negó su ayuda a los menesterosos. Además, el santo tenía una lista donde figuraban los nombres de las familias más indigentes y se encargaba de atender sus necesidades.