MADRID,
"Creo que lo que no podemos hacer alrededor de las mesas de negociación entre los pueblos, podemos hacerlo con la música, y sobre todo con la música sagrada", dice Sor Marie Keyrouz, quien desde pequeña vivió en carne propia las guerras en oriente e inició un proyecto con músicos de otras religiones por la paz.
"La música es el lenguaje más convincente para el alma de un músico y el más directo para el corazón del oyente, es mi lenguaje favorito. Cuando decidí hacerme monja, había elegido tratar de ser un pequeño puente entre el cielo y la tierra", declaró Sor Marie Keyrouz al diario ABC.
Nació en El Líbano en 1963 y se inició en el canto desde muy pequeña. El primer día que cantó en la iglesia tenía cinco años y lo hizo durante la Semana Santa. El estallido de la guerra en 1982 en su país lo cambiaría todo.
"En ese momento fue cuando decidí hacer de mi voz el instrumento de mi vida y de mi misión; empecé mis estudios de musicología y antropología para convertir mi voz y mi música en un homenaje a la Palabra de Dios y al objetivo de la paz", señaló.
Es así que en 1984 inició "L'Ensemble de la Paix" (El conjunto de la paz), orquesta de compositores, músicos, instrumentistas y cantantes de todas las procedencias y religiones.