SAN FRANCISCO,
El Arzobispo de San Francisco (Estados Unidos), Mons. Salvatore Cordileone, enfrenta un intenso ataque del lobby gay tras decidir poner orden en materia de moral y doctrina de la Iglesia en las escuelas católicas de su arquidiócesis. En una reciente entrevista, el Prelado ha explicado que su deber es "defender a los más débiles ante la mentira".
A inicios de febrero de este año, Mons. Salvatore Cordileone anunció la implementación de nuevas cláusulas en los contratos a los maestros de las escuelas católicas, con el propósito de evitar que los docentes minen la moral sexual con su comportamiento personal o se sumen al activismo público en posiciones contrarias a la doctrina católica, en temas fundamentales como el aborto y la defensa de la vida; o el mal llamado "matrimonio" gay.
Las nuevas disposiciones fueron recibidas con ira por el lobby homosexual, que encabezó ataques, protestas y amenazas contra el Arzobispo de San Francisco, quien es además Presidente del Subcomité para la Promoción y Defensa del Matrimonio de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB).
Un grupo de supuestos "padres preocupados" contrató los servicios de la empresa de relaciones públicas de Sam Singer, con el objetivo de atacar al Arzobispo y forzar la eliminación de las nuevas normas, manipulando a la opinión pública.
Además, ocho legisladores de California críticos de Mons. Cordileone le enviaron una carta el 17 de febrero exigiéndole retirar las cláusulas sobre moralidad.
En reciente entrevista con el sitio web Tempi en italiano, Mons. Salvatore Cordileone lamentó que exista "una gran confusión y una renuncia a usar la razón y a conocer los hechos" en torno a las nuevas normas para las escuelas católicas en San Francisco.