En ese sentido, reiteró la denuncia del Episcopado, que en enero advirtió del proyecto totalitario que busca imponer el régimen. "El proyecto es de naturaleza totalitaria y de orientación político-ideológica socialista marxista (a la castrocubana y en línea del 'socialismo real' (con apelaciones autóctonas)", señaló.
El Arzobispo Emérito explicó que este proyecto "tiene y reclama su lógica, según la cual lo que otros estiman como fracaso o ineficiencia no es tanto tal; el régimen va a lo que va y en este sentido la destrucción (por ejemplo de empresas productivas con el resultado de desabastecimiento etc.) y lo negativo para el común de los mortales, es visto como positivo para el régimen, en razón de lo que piensa 'construir' después (la sociedad comunista)".
Asimismo, mientras "la hegemonía comunicacional" es mala para quienes buscan la democracia, el control de los medios es bueno "para la compactación revolucionaria socialista del pensamiento único". Igual sucede con los derechos humanos, estos "son funcionales también para la revolución".
"Con fundamento en la identificación del proyecto 'socialista' que hace el Episcopado se puede decir –y yo lo he dicho públicamente– que este régimen, desde el punto de vista constitucional y moral, es ilegítimo. Se hace necesaria entonces una 'transición' que, en marco constitucional, permita una reconstrucción democrática, pluralista", señaló Mons. Ovidio Pérez.
"Yo no entro en lo político operativo de esto, porque no es de mi competencia y especialización. Diría sí que, de acuerdo a estudios serios de opinión, es lo que aspira o desearía un 80 por ciento de la población, que sufre muchas carencias graves (piénsese en seguridad, abastecimiento, servicios públicos...) y desea paz, tranquilidad, sosiego después de años de tanta exasperación, clima de amenazas, conflictividad", afirmó.