ROMA,
Desde Roma, el recién creado Cardenal Alberto Suárez Inda, Arzobispo de Morelia (México), ha condenado la "doble vida" de varios políticos de su país, que "van a Misa… y luego abusan de sus puestos de poder".
En declaraciones a ACI Prensa el 16 de febrero, el Cardenal Suárez Inda dijo que "es triste que varios de nuestros políticos formados en universidades católicas o de carácter cristiano no han sido precisamente modelo de honestidad. No quiero dar nombres, porque no toca en ningún momento, pero todo el mundo percibe que tristemente hay una doble vida en muchos católicos que van a Misa, reciben los sacramentos y luego abusan de sus puestos de poder para robar y a veces para matar, y eso es conculcar la Ley Sagrada y contradecir el anuncio cristiano".
El Cardenal respondía así a una pregunta relacionada con la corrupción en el país, subrayada por la desaparición de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa.
"Repito, la corrupción no es exclusiva de México y tenemos que irla corrigiendo a base de una evangelización más seria, una educación moral. Tristemente en México, también de parte del estado, se abandonó toda formación ética, se acabó con el civismo, una asignatura de las escuelas, y muchas veces los maestros tampoco se preocupan de la formación integral de las personas. Nos toca a todos como Iglesia: padres de familia, maestros, sacerdotes, buscar realmente una relación de justicia, verdad y confianza mutua. Porque a veces no estamos cuidando unos de otros y no nos cuidamos unos a otros", remarcó el Purpurado.
En este sentido el Cardenal Suárez explicó que a partir de este "tristísimo" asesinato, la Iglesia se ha mantenido en una línea de libertad para analizar y tomar una postura de defensa de los derechos humanos y reconocer el gran dolor de los padres de familia y la terrible gravedad del crimen.
"¿Cómo puede ayudar la Iglesia a acabar con la corrupción? En primer lugar yo creo que siendo nosotros mismos ejemplos de conversión, porque la corrupción es una tentación que puede llegar a cualquier persona, y debemos ser testigos verdaderos de honestidad. Hay que ser servidores de formar mejor a nuestros laicos, sacerdotes para que sean honestos", animó.