PARIS,
El Obispo de Belley-Ars (Francia), Mons. Pascal Roland, decidió ordenar el retiro del Santísimo de todas las capillas e iglesias de sus diócesis luego de una ola de robos sacrílegos ocurridos en los últimos días en la región.
Tras diversos hechos relacionados con "la profanación de los tabernáculos y el robo de copones" y respaldado por el Código de Derecho Canónico, el Prelado emitió una ordenanza en la que solicita que "el Santísimo sacramento será retirado de los tabernáculos de todas las Iglesias y capillas parroquiales y será depositado en lugar seguro".
"La puerta de los tabernáculos permanecerá ostensiblemente abierta", prosigue.
Para las necesidades de la oración pública o privada, explica el Obispo de la tierra de San Juan María Vianney (el Cura de Ars), "el Santísimo sacramento podrá ser recolocado temporalmente en esos tabernáculos con la condición de que se asegure una presencia suficiente de fieles".
Estas medidas entraron en vigor el 10 de febrero y "permanecerán hasta nueva orden".
"El Obispo espera que estas medidas excepcionales manifiesten a todos la gravedad de estos hechos y contribuyan a desalentar su repetición", concluye.