CARACAS,
Es necesario que los venezolanos nos acerquemos más a Dios y dejemos de lado "los vicios y pecados" que llevaron al país a esta situación, exhortó el Arzobispo de Caracas (Venezuela), Cardenal Jorge Urosa, en su mensaje por el Año Nuevo 2015.
"Si queremos ser felices tenemos que renovarnos espiritualmente", señaló el Purpurado, al reiterar que "el país necesita urgentemente el diálogo y la concertación, a fin de resolver nuestros conflictos de manera pacífica, descartando la violencia".
"Más allá de las medidas políticas, económicas y sociales que se deben necesariamente implementar en Venezuela para solucionar los graves problemas que tenemos, es necesario que los venezolanos, y en especial los católicos, nos acerquemos más a Dios, y dejemos a un lado los vicios y pecados que nos han llevado a esta situación", indicó.
El Arzobispo recordó que para muchos analistas este año 2015 será "particularmente difícil para los venezolanos, debido a graves dificultades de orden político, económico y social". Sin embargo, advirtió que "generalmente, las causas de esas dificultades son las conductas erradas de las personas: el olvido de Dios y la indiferencia religiosa, el odio y el egoísmo, el afán de lucro y la idolatría del dinero, el ansia de poder y la soberbia política, el desenfreno de las pasiones, el ocio y la pereza…"
Por ello, exhortó a los venezolanos a fortalecer la práctica religiosa escuchando "la voz del Señor que nos llama a la conversión, a vivir de acuerdo a su Palabra, a participar en la Santa Misa dominical, a orar incesantemente, a guardar y cumplir los Mandamientos de la Ley de Dios".
"El camino del pecado, del desorden, del relajo afectivo-sexual, no es el camino de la felicidad. Si queremos ser felices hemos de agarrarnos de la mano de Dios y caminar con El, escuchando y cumpliendo su palabra", aseguró.