MADRID,
El Obispo de Huesca y de Jaca (España), Mons. Julián Ruiz Martorell, llamó a los españoles a "volver a despertar la conciencia de la belleza del don de la vida", ante crímenes como el aborto que han generado "una profunda herida social" y "una honda injusticia en las relaciones humanas y sociales".
Obispo de Huesca y de Jaca ha enviado su carta pastoral titulada 'Inocentes', fechada el 28 de diciembre, día en el que se celebra la fiesta de la Sagrada Familia y se recuerda a los Santos Inocentes, los niños que murieron por orden de Herodes I el Grande, para así matar al recién nacido Jesús de Nazaret.
El Obispo de Huesca y Jaca precisa en su carta que "entre los inocentes de nuestros días se cuentan los niños a los que se impide nacer", por eso pide oraciones a la Sagrada Familia "para que proteja a los niños no nacidos".
"El derecho fundamental, el presupuesto de todos los derechos humanos, es el derecho a la vida, desde su concepción hasta la muerte natural", recuerda el Prelado y anima a "volver a despertar la conciencia de la belleza del don de la vida. El aborto es una profunda herida social, una honda injusticia en las relaciones humanas y sociales".
Además Mons. Ruiz subraya que "el drama del aborto provocado hiere al tejido social, deja huellas indelebles en la mujer y en las personas que la rodean, produce consecuencias devastadoras para la familia y para la sociedad y favorece el desprecio a la vida".
"Nuestra sociedad vive una insuficiencia radical en lo que se refiere al respeto de la vida naciente, al desarrollo de la vida inocente. Como personas adultas y, sin embargo, a veces débiles en el pensamiento y en la voluntad, necesitamos dejarnos llevar de la mano por el Niño de Belén y contemplar el sufrimiento de tantos inocentes a los que no se deja nacer, las víctimas inocentes de una sociedad anestesiada", precisa el Prelado.