ROMA,
"Le entregué el disco, le expliqué que era el fruto de mi pequeña contribución al servicio dentro de la Iglesia, y le pedí la bendición, que es lo que yo realmente quería. Él me sonrió", son las palabras de Sor Cristina Scuccia, la religiosa ganadora de The Voice Italia, después de su encuentro con el Papa Francisco el 10 de diciembre en la Plaza de San Pedro.
"La verdad es que no hay palabras para describir la emoción que sentí. Le estreché la mano, y ¡fue difícil dejarlo irse! Fue todo en fracciones de segundo, fue muy rápido, pero para mí fue muy intenso e importante", afirmó el 15 de diciembre en entrevista con ACI Prensa.
La religiosa ursulina añadió que "si pudiera de nuevo volver a encontrarlo sería un sueño. Es el Papa que proclama la ternura, pero en realidad vive la ternura. Se ve en sus ojos, en su mirada sencilla, de padre verdadero. Tiene una luz que penetra el alma, y por tanto fue realmente importante este encuentro con él".
Sor Cristina aseguró que la fama alcanzada no le ha hecho perder la vocación. "Soy una religiosa a todos los efectos", señala. La hermana hizo la profesión de fe el 29 de julio de 2012 y desde hace seis años forma parte de la congregación de las Ursulinas de la Sagrada Familia. Renovará sus votos el próximo 2 de febrero, día de la Vida Consagrada. "Yo cada día le digo 'sí' a Dios y me entrego a su voluntad y espero que el Señor me tenga en sus brazos hasta el fin de mis días", afirmó.
Sobre la controversia desatada por la elección del tema 'Like a Virgin' como single para lanzar su álbum, la ursulina explicó que "cuando Dios toca a una criatura le dona una nueva vida, como ha ocurrido con 'Like a Virgin', de modo que quien no piensa igual, quien no ha acogido esto, creo es libre de hacerlo, el principio de Dios es la libertad. Yo soy un pequeño instrumento que propone un mensaje de amor. Puede ser acogido o no. Yo acojo las críticas, me hacen crecer y reflexionar todavía más, pero continúo adelante con mi mensaje de amor".
La religiosa dijo que después de The Voice ha recibido cientos de cartas y testimonios de personas que han vuelto al catolicismo gracias a su actuación. "Realmente muchas veces me digo, si esto consigue que solo una persona alce los ojos hacia Dios, para mí mi misión ya ha sido cumplida".