El 13 de diciembre de 1969, a tan sólo cuatro días de su cumpleaños 33, el jesuita Jorge Mario Bergoglio, hoy conocido como el Papa Francisco, recibió la ordenación sacerdotal de manos del entonces Arzobispo de Córdoba (Argentina), Mons. Ramón José Castellano.
Hace 55 años, el sábado 13 de diciembre, vísperas del tercer domingo de Adviento, marcó un momento especial para el futuro Pontífice. En la liturgia de la Iglesia este día es llamado también Domingo de Gaudete o de la Alegría, para muchos el sello del pontificado del Papa Francisco, junto con la misericordia.
Según el libro El jesuita: Conversaciones con el Cardenal Jorge Bergoglio, Francisco descubrió su vocación al sacerdocio mientras estaba en camino a celebrar el Día de la Primavera.
Cuando pasó por la iglesia del barrio bonaerense de Flores para confesarse, recibió una especial inspiración del sacerdote que lo acogió.
En otra oportunidad el Santo Padre contó que inicialmente su madre no apoyó su decisión de entrar al sacerdocio, a pesar de que era una católica devota. Sin embargo, cuando el hijo fue ordenado, ella aceptó su llamado y le pidió la bendición al final de la ceremonia.
Jorge Mario Bergoglio prosiguió su formación como jesuita entre 1970 y 1971 en España. El 22 de abril de 1973 emitió sus profesiones perpetuas en la Compañía de Jesús.