CORDOBA,
El Obispo de Córdoba (España), Mons. Demetrio Fernández ha enviado su carta pastoral semanal en la que habla de la Fiesta de la Inmaculada Concepción, patrona de España. "En el cristianismo, el ideal tiene rostro concreto: se llama María. Lo que Dios ha hecho en ella quiere hacerlo en nosotros, es posible, ya lo ha cumplido", afirma el Prelado.
"En el contexto del Adviento, brilla la fiesta de María Santísima, primera redimida, fruto y primicia de la redención de Cristo", explica el Prelado y precisa que María "va delante de nosotros como madre buena e inspira nuestro caminar. Mirándola a ella, entendemos la vida cristiana y a dónde nos quiere llevar el Señor".
Mons. Fernández recuerda que "María ha sido colmada de gracia en el momento mismo de su concepción, y por eso, librada de todo pecado, incluso del pecado original. Es la Inmaculada Concepción, la Purísima, la Llena de gracia. 'Toda hermosa eres María y en ti no hay mancha de pecado original'".
"Esta dimensión de María ha sido vivida en la historia de la Iglesia de manera universal, y particularmente en España", recuerda el Obispo y explica que por eso, María es patrona de España en este título de la Inmaculada.
"España contribuyó especialmente a que esta verdad se extendiera por todo el mundo", afirma el Prelado y asegura que este país "capitaneó los votos inmaculistas, es decir, las promesas de defender la limpia concepción de María Santísima, su libertad del pecado y su plenitud de gracia desde el comienzo".
En 1854 Pío IX proclamó el dogma de la Inmaculada Concepción, y desde entonces todos los años el Papa va a la plaza de España en Roma para depositar un ramo de flores a la Inmaculada. "La Inmaculada y España van unidas en este gesto del Papa, que perdura hasta el día de hoy", asegura el Obispo.