BALTIMORE,
Tras las elecciones parlamentarias de la semana pasada, los Obispos de Estados Unidos pidieron al Congreso y al presidente Obama trabajar juntos en una pronta reforma migratoria que respete las familias y la dignidad humana.
"Instamos a ambas partes a trabajar juntos para finalmente reformar este sistema roto e inmoral", dijo el Obispo Auxiliar de Seattle, Mons. Eusebio Elizondo, a sus hermanos Obispos en su reunión anual de otoño en Baltimore.
El Prelado habló de la necesidad de abordar las "tragedias humanas" causadas por el sistema actual de inmigración. Los obispos no están tratando de "tomar partido político", explicó Mons. Elizondo, sino que han trabajado durante mucho tiempo en apoyo de "una reforma migratoria humana".
El surgimiento de un Senado republicano después de las elecciones de la semana pasada ha planteado serias dudas sobre cualquier paso de la reforma migratoria integral en la próxima legislatura del Congreso, ya que muchos republicanos han dicho que primero quieren la frontera asegurada antes de tomar otras acciones, tales como un potencial camino a la ciudadanía para inmigrantes no documentados que residen actualmente en Estados Unidos.
El presidente Obama, por su parte, está "a la espera de tomar una acción ejecutiva por su cuenta" en materia de inmigración, según el secretario de prensa de la Casa Blanca, Josh Earnest.
Mons. Elizondo, que encabeza el Comité sobre Migración de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos, reconoció su aprobación de la potencial acción ejecutiva "para proteger ciertos individuos de la deportación, especialmente para detener la separación de familias inmigrantes".