ROMA,
Hace unos días un sacerdote hizo parte de una antigua tradición e intercambió el solideo –el sombrero blanco que usa el Papa– que llevaba con el que en ese momento llevaba el Sumo Pontífice Emérito Benedicto XVI, a quien describió como "muy saludable y brillante".
La antigua tradición consiste en que si se compra un solideo blanco en la sastrería del Papa y se presenta durante una audiencia papal, la Guardia Suiza se encargará de intercambiarlo por el que lleva el Santo Padre en ese momento.
En este caso el intercambio se hizo personalmente y en una audiencia privada en el Vaticano. En declaraciones a ACI Prensa el 7 de noviembre, Mons. Anthony Figuereido señaló que "nos puso muy contentos la alegría de Benedicto y su serenidad. Él es un hombre de paz, una paz en la voluntad de Dios para él hoy, que es rezar por la Iglesia".
Este sacerdote sirve como director espiritual en el Pontificio Colegio Norteamericano y visitó al Sumo Pontífice Emérito junto a una delegación de la confederación "Caritas in Veritate International", una institución que labora en 80 países y cuya fundación se inspiró en las encíclicas de Benedicto XVI, Caritas in veritate y Deus Caritas est.
Tras comentar que atesorará el solideo en todos los años por venir, Mons. Figuereido comentó que Benedicto XVI es "un hombre tierno lleno de humildad", un buen ejemplo de lo que el Papa Francisco quiere decir cuando habla de la ternura.
Benedicto XVI "está con muy buena salud y su mente está muy aguda, tal vez más aguda que cuando fue el gran teólogo y el gran Papa que supimos fue para todos", indicó.