Nina Pham, una enfermera de Dallas (Estados Unidos), que ha estado batallando contra el virus del ébola tras atender a un paciente en Texas, ha sido declarada libre de la enfermedad, y dio gracias a Dios y a todos los que han rezado por ella en las últimas semanas.
"Me siento afortunada y bendecida de estar parada aquí hoy", dijo Pham en una conferencia de prensa el 24 de octubre. "Primero y por sobre todo quiero agradecer a Dios, a mi familia y amigos. A través de este calvario, he puesto mi confianza en Dios y en mi equipo médico".
Pham agradeció a todos los que han estado involucrados en su cuidado, tanto de Texas como de Maryland.
Además expresó su agradecimiento al Dr. Kent Brantly, sobreviviente del ébola, por donar su plasma, llamándolo un "acto abnegado".
"Creo en el poder de la oración porque sé que tanta gente en todo el mundo ha estado rezando por mí", dijo. "Me uno en oración ahora por la recuperación de otros".
Se cree que la enfermera de 26 años, descrita por sus amigos como una devota católica, contrajo el ébola mientras cuidaba a Thomas Eric Duncan, un paciente en el Hospital Presbiteriano de Salud de Texas, en Dallas. Duncan falleció de ébola el 8 de octubre.