BUENOS AIRES,
El Obispo de Río Gallegos (Argentina), Mons. Miguel Ángel D'Annibale, compartió una reflexión sobre el evangelio dominical, en el que Jesús es puesto a prueba por un grupo de fariseos sobre el deber de pagar impuestos al imperio romano, y responde "den al César lo que es del César, y a Dios lo que es de Dios". Al respecto, el Prelado invitó a pensar si Dios tiene un lugar en la vida cotidiana.
Mons. D'Annibale explicó que las palabras de Jesús van dirigidas a los fariseos, que lo perseguían para encontrar razones de enjuiciarlo. Como los judíos estaban invadidos por los romanos, que explotaban con sus impuestos al pueblo elegido, haberse mostrado favorable al pago hubiera sido motivo de escándalo, como así también rechazar abiertamente la obediencia a la autoridad.
"Jesús, que es verdadero Dios y verdadero hombre, responde de modo sorprendente. 'Den al César lo que es del César, y a Dios lo que es de Dios'. Hay cosas que son circunstanciales en la vida: hoy estamos con el imperio romano, entonces démosle lo que es de ellos. ¡Pero estas personas se estaban olvidando de dar a Dios su corazón!", dijo el Obispo.
"Esta enseñanza sigue siendo tan válida, porque nos preocupamos muchas veces por estas tantas problemáticas, que son ciertas. Pero tenemos que advertir la presencia de Dios y la vida de Dios en medio de los hombres", consideró el Prelado.
"Este evangelio nos sostiene, nos anima y nos pide aprender a ser capaces de darle a Dios lo que corresponda", sugirió.
Mons. D'Annibale también ofreció algunas líneas para meditar el evangelio: "Tu corazón, el tuyo y el mío, ¿tienen al día un tiempo exclusivo para Dios? Ese tiempo que llamamos oración… ¿lo tenés? Porque hay que tener un tiempito para que el corazón sea de Dios y para Dios".