REDACCION CENTRAL,
El 13 de octubre de 1917, mientras miles de peregrinos se encontraban en Fátima (Portugal), se produjo el llamado “milagro del sol”, en el que se pudo ver al sol en movimiento, haciendo una especie de “danza”.
El acontecimiento tuvo una duración de alrededor de tres minutos, y sucedió después de la última aparición de la Virgen María a los pastorcitos Jacinta, Francisco y Lucía.
Tras una intensa lluvia, las nubes se abrieron y dejaron ver el sol, que, según los testigos, se veía como un disco de plata.
Entonces, sus rayos tomaron diferentes colores y el astro pareció caer sobre las miles de personas, que se habían puesto de rodillas.
El periodista del diario portugués O Século, Avelino de Almeida, estimó que, al momento del milagro, había unas 40 mil personas en el lugar, pero el profesor de ciencias naturales de la Universidad de Coimbra, Joseph Garrett, calculó que los testigos fueron unos 100 mil.
Además del milagro del sol, los pastorcitos dijeron haber visto imágenes de Jesús, la Virgen María y San José bendiciendo a la multitud.