ROMA,
Carmen Peña García, directora especialista en Causas Matrimoniales de la Universidad Pontificia Comillas de Madrid (España) aclaró que en la Iglesia no se "anula" ningún matrimonio, sino que se le declara nulo –que nunca existió– ya que el mensaje de Jesús en el Evangelio es preciso: "Lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre".
Peña es profesora de derecho canónico y ha trabajado en el tema de la familia como defensora del vínculo y promotora de justicia del Tribunal Metropolitano de Madrid desde hace varios años. Este recorrido a favor de la familia le hizo llegar al Vaticano para participar como experta en el Sínodo Extraordinario para la Familia que se realiza hasta el 19 de octubre.
En conversación con ACI Prensa en Roma, la canonista española expresó que la Iglesia Católica se esfuerza por ayudar a entender su situación frente al matrimonio a aquellas parejas separadas cuyas nupcias nunca surtieron efecto a los ojos de Dios.
"No todos los primeros matrimonios fracasados son nulos, pero muchos sí pueden serlo. El reconocimiento de la nulidad no es tan difícil como a veces la gente piensa; hay muchas causas de nulidad y muchos motivos que la provocan. A veces hay un desconocimiento sobre esto, y se podría hacer mucho en este sentido", dijo.
"Un modo de solventar muchas situaciones de divorciados vueltos a casar que quieren estar en plena comunión eclesial y quieren volver a una vida plena dentro de la Iglesia pasa por el estudio que hace la Iglesia a través de sus tribunales si su primer matrimonio fue válido o no", añadió.
En relación a aquellas parejas divorciadas cuyo matrimonio fue válido de acuerdo a las normas del derecho canónico, Peña afirmó que la Iglesia está en camino para darles un acompañamiento.