VATICANO,
Al presidir hoy el rezo del Ángelus, el Papa Francisco alentó "a no reducir el Reino de Dios a los confines de la 'iglesita', de nuestra iglesia pequeñita", pues todos "estamos llamados ampliar la Iglesia a las dimensiones del Reino de Dios".
El Santo Padre señaló que "solo hay una condición: ponerse el traje de fiesta. Es decir testimoniar la caridad concreta a Dios y al prójimo".
A continuación, el texto completo de las palabras previas al rezo del Ángelus, gracias a la traducción de Radio Vaticano:
Queridos hermanos y hermanas, en el Evangelio de este domingo, Jesús nos habla de la respuesta que se da a la invitación de Dios - representado por un rey – a participar en un banquete de bodas (cf. Mt 22,1-14).
La invitación tiene tres características: la gratuidad, la extensión, la universalidad. Los invitados son tantos, pero sucede algo sorprendente: ninguno de los elegidos acepta participar de la fiesta, dicen que tienen otras cosas que hacer; es más, algunos muestran indiferencia, extrañeza, incluso fastidio.
Dios es bueno con nosotros, nos ofrece gratuitamente su amistad, nos ofrece gratuitamente su alegría, la salvación, pero muchas veces no recibimos sus dones, ponemos en primer lugar nuestras preocupaciones materiales, nuestros intereses, y también cuando el Señor nos llama, a nuestro corazón, tantas veces parece que nos molestara.