ROMA,
El Cardenal Francesco Coccopalmerio, Presidente del Pontificio Consejo de los Textos Legislativos y miembro de la Comisión Especial creada por el Papa para la reforma del proceso matrimonial canónico, explicó que la declaración de la nulidad matrimonial "no es una anulación del lazo marital".
En la conferencia de prensa realizada ayer en la Sala de Prensa del Vaticano, el Cardenal italiano se refirió al tema de la agilización del proceso de nulidad matrimonial, algo que los participantes del Sínodo han tratado ampliamente.
El Purpurado dijo que el objetivo de la Comisión para la que ha sido nombrado por el Papa el pasado 27 de agosto "es hacer más simple y más rápido el proceso de obtener una declaración de nulidad, que no es una anulación del lazo marital, ya que la Iglesia no puede anular un matrimonio celebrado y consumado".
La Comisión creada por el Santo Padre tiene como misión "preparar una propuesta de reforma del proceso matrimonial, buscando simplificar sus procedimientos, haciéndolo más sencillo y salvaguardando el principio de indisolubilidad del matrimonio".
El Cardenal italiano explicó que "en el debate en el Sínodo se han presentado tres propuestas para agilizar el procedimiento".
La primera, dijo podría ser la eliminación de una doble conformidad de sentencia para emitir un decreto de nulidad. La segunda consiste en que "la decisión de la nulidad no se tome por un juez colegiado (hay tres jueces que actúan colegiadamente) sino por una corte con un solo juez".