BUENOS AIRES,
Una multitud, estimada en 200 mil personas de las diez diócesis del Nordeste Argentino, participó este fin de semana de una nueva edición de la Peregrinación Juvenil del Nordeste Argentino (NEA) hacia la basílica de Nuestra Señora de Itatí, que llevó por lema: "Con María, con alegría, sin miedo para servir".
Durante la madrugada, se sucedieron las misas en el santuario y se atendieron confesiones.
La misa central, a las 9:30, fue presidida por el Arzobispo de Corrientes, Mons. Andrés Stanovnik, y concelebrada por el Arzobispo Ramón Dus, de Resistencia y los Obispos Mons. Hugo Santiago, de Santo Tomé; Mons. Damián Bitar, de Oberá; Mons. José Vicente Conejero Gallego, de Formosa; Mons. Ricardo Faifer, de Goya, y Mons. Juan Rubén Martínez, de Posadas, quien estuvo a cargo de la homilía.
"Van a venir muchos falsos predicadores en esta época tan mercantil, y nos van a proponer una fe "light", consumista. 'Vení que no vas a sufrir más', 'Con unos milagritos tendrás bienestar y todo será fácil'. Cuando todo es tan fácil desconfíen, esa no es la fe de Jesucristo, su camino", les advirtió.
Tras reconocer que "es exigente el amar a otro con respeto, buscando su bien", destacó que "el amar es dar la vida".
"Hoy muchos creen que todo se compra y se vende. Y todos, sobre todo los jóvenes, deben tener la libertad de oponerse a todo lo que está mal", insistió al tiempo que los instó a salir del "masomenismo".