SANTIAGO,
Al presidir hoy la tradicional oración por la Patria, el Arzobispo de Santiago (Chile), Cardenal Ricardo Ezzati destacó la importancia de defender la vida humana desde su origen hasta la muerte natural, al tiempo que señaló que la falta de dedicación a la dignificación de la vida de las familias "no es de Dios".
En la ceremonia estuvieron presentes la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, los presidentes del Senado, de la Cámara de Diputados y el Tribunal Constitucional, así como representantes de las Fuerzas Armadas, Carabineros y Policía de Investigaciones.
También asistieron los representantes diplomáticos con sede en Santiago.
Según informó en un comunicado el departamento de Comunicaciones del Arzobispado de Santiago, el Cardenal Ricardo Ezzati alentó hoy al desarrollo de "un gran Propósito Nacional, basado en el diálogo social, concebido como un decisivo pilar para avanzar y concretar una nueva cultura de proyecto país", en la que se humanice y se comparta con equidad el desarrollo de Chile.
Lo primero, dijo el Cardenal, es velar por la dignidad de la persona humana, "que debe ser tratada con sumo respeto, desde su origen hasta su muerte".
Además, hizo un llamado a una justicia social "que permita a todos los chilenos, especialmente los más pobres, el acceso a los bienes esenciales de salud, educación, vivienda, trabajo decente y remuneraciones que permitan a los trabajadores desarrollar con dignidad su vida personal y familiar".