VATICANO,
En la Misa celebrada hoy ante más de 10 mil fieles en el cementerio monumental de Redipuglia, durante su visita a la región italiana de Friuli Venezia, el Papa Francisco señaló que en la actualidad los crímenes, masacres y destrucciones suman una tercera guerra mundial, que es combatida "por partes".
En el cementerio militar de Redipuglia, que visitara San Juan Pablo II en 1992, reposan los cuerpos de 100 mil jóvenes soldados caídos durante la I Guerra Mundial, de cuyo inicio en 2014 se cumplen 100 años. Sesenta mil de estos fallecidos aún permanecen sin identificar.
En este camposanto, el Santo Padre recordó el sacrificio y el sufrimiento los caídos en todas las guerras.
En la Misa participaron el Arzobispo de Viena (Austria), Cardenal Christoph Schonborn, y el Arzobispo de Zagreb, Cardenal Josip Bozani?, además de Obispos procedentes de Eslovenia, Austria, Hungría y Croacia.
En su homilía, el Papa Francisco señaló que "después de haber contemplado la belleza del paisaje de esta zona, en la que hombres y mujeres trabajan para sacar adelante a sus familias, donde los niños juegan y los ancianos sueñan… encontrándome aquí, en este lugar, en este cementerio, solamente acierto a decir: la guerra es una locura".
"Mientras Dios lleva adelante su creación y nosotros los hombres estamos llamados a colaborar en su obra, la guerra destruye. Destruye también lo más hermoso que Dios ha creado: el ser humano".