ROMA,
"El Estado Islámico viene del infierno, ni los demonios sabrían encontrar peores medios para hacer tanto mal a la gente", fueron las palabras de Mons. Shlemon Warduni, Obispo auxiliar de Bagdad de los caldeos para describir las atrocidades cometidas por los yihadistas contra los cristianos y otras minorías en Irak, a quienes han decapitado o esclavizado por negarse a convertirse al Islam.
El Prelado, que participó recientemente en el Meeting de Rimini, en Italia, señaló que "la suerte de todos los iraquíes es la misma. Todos están inquietos, no solo los cristianos, porque no hay paz ni seguridad desde hace muchos años".
Sin embargo, en los últimos meses sucede algo que "nunca pudimos ni imaginar: que estos maleantes han obligado a los cristianos y a todas las minorías a huir en masa. Los cristianos viven en Mosul desde hace dos mil años", pero ya no hay más una oración en la ciudad.
"Posiblemente esta gente (del Estado Islámico) viene del infierno, son peores que los demonios. Por esto hemos gritado en voz alta para pedir ayuda a todo el mundo: a los cristianos, musulmanes, ateos, a toda la gente de buena voluntad. Para que nuestro pueblo, nuestros fieles, nuestros ancianos, nuestros niños no sean maltratados de este modo duro y terrible", expresó en declaraciones a I Tempi difundidas el 29 de agosto.
Mons. Warduni señaló que los miles de refugiados en el Kurdistán iraquí necesitan vivienda, comida, ropa y medicinas. "Muchos de ellos duermen bajo el sol con este calor terrible".
Sobre las acciones de los yihadistas, relató que incluso se atrevieron a "robar los aretes a una niña de dos años y arrancar 15 euros de la mano de una anciana". "Han sembrado el terror en los corazones de la gente. Incluso antes que entraran a la llanura del Nínive, de hecho, esos pueblos estaban casi del todo vacíos. Pedimos tantas cosas al mundo para que los cristianos y demás puedan en primer lugar vivir y luego lo puedan hacer con dignidad", expresó.