SEÚL,
Al culminar la Misa por la Solemnidad de la Asunción de la Virgen María, en el estado mundialista de Daejeon, durante su viaje a Corea del Sur, el Papa Francisco presidió el rezo del Ángelus.
El Santo Padre confió a la Virgen "de modo especial a cuantos han perdido la vida en el naufragio del ferry 'Se Wol', así como a los que todavía hoy sufren las consecuencias de esta gran desgracia nacional.
A continuación, ACI Prensa ofrece a sus lectores el texto completo de las palabras del Papa Francisco antes del rezo del Ángelus:
Al final de la Misa, nos dirigimos de nuevo a María, Reina del Cielo. Le ofrecemos nuestras alegrías, sufrimientos y esperanzas. Le confiamos de modo especial a cuantos han perdido la vida en el naufragio del ferry "Se Wol", así como a los que todavía hoy sufren las consecuencias de esta gran desgracia nacional.
El Señor acoja a los difuntos en su paz, consuele a los que lloran, y siga sosteniendo a quienes han acudido generosamente en auxilio de sus hermanos y hermanas. Que este trágico suceso, que ha unido a los coreanos en el dolor, refuerce también su voluntad de colaborar solidariamente en el bien común.
Pidamos también a la Virgen María que vuelva sus ojos misericordiosos sobre cuantos sufren, en especial los enfermos, los pobres y los que carecen de un trabajo digno.