ROMA,
"Hay una vocación particular para los ancianos y los abuelos en la sociedad y la Iglesia", afirmó el P. Andrea Ciucci, del Pontificio Consejo para la Familia al destacar el encuentro que el 28 de septiembre tendrá el Papa Francisco con miles de ancianos en la Plaza de San Pedro; una iniciativa que nació del propio Santo Padre.
En declaraciones a CNA -agencia del grupo ACI en inglés- el sacerdote recordó que muchas veces el Papa ha recordado la importancia de las personas mayores, como cuando dijo que "el cuidado que se da los ancianos, como a los niños, es un indicador de la calidad de una comunidad". Cuando los ancianos son echados fuera, cuando son aislados y a veces se desvanecen por la falta de cuidado, es un signo terrible".
Por ello, subrayó la importancia del encuentro titulado "La bendición de una larga vida", donde se espera que participen miles de ancianos y abuelos venidos de Italia, de otros países de Europa y probablemente del resto del mundo. Incluso aquellos miles que, aunque no podrán asistir físicamente, participarán a través de Internet y la televisión.
"Es muy importante para nosotros y para las familias del mundo presentar, poner una luz sobre esta etapa de la vida", afirmó. "Las personas mayores y los abuelos no son solo parte del cuidado pastoral", sino que tienen "una particular vocación".
En ese sentido, dijo que además de ser transmisores de la fe y de ser una ayuda para los padres, "hay otras áreas igualmente importantes a ser consideradas, como la oración del anciano, de los abuelos, y la transmisión del Evangelio"
Además, añadió, pueden ayudar a comprender que el debilitamiento de la vida no es una tragedia final, sino más bien "el testimonio de la esperanzan en el más allá".