Un nuevo estudio analizó la respuesta de la sociedad frente al Síndrome de Down y ofreció recomendaciones, particularmente en el ámbito médico, para mejorar la vida de las personas con esta condición genética.
"El 99% de las personas diagnosticadas con Síndrome de Down dicen estar felices con sus vidas. Los estudios también muestran que su alegría tiene un efecto dominó en sus familias y comunidades", señala el presidente del centro de investigación Charlotte Lozier Institute, Chuck Donovan, encargado de publicar el estudio.
En el informe titulado Improving Joyful Lives: Society's Response to Difference and Disability (Mejorando vidas felices: la respuesta de la sociedad a la diferencia y discapacidad), el autor Mark Bradford entrega recomendaciones para mejorar las vidas de las personas con Síndrome de Down y aborda la reacción negativa de la sociedad a esta condición, especialmente entre la comunidad médica.
Según la investigación del Dr. Brian Skotko en el Programa Síndrome de Down del Hospital General de Massachusetts, la mayoría de las personas con Síndrome de Down y sus familias muestra satisfacción con sus vidas.
Sin embargo, aún existe una discrepancia entre estas estadísticas positivas y el aumento en el número de abortos selectivos por discapacidad luego un diagnóstico prenatal con resultado de Síndrome de Down.
Esta tendencia de abortar a quienes presentan una discapacidad es uno de los desafíos más grandes que la comunidad con Síndrome de Down enfrenta en la actualidad, asegura Bradford.