En el día en el que Estados Unidos celebra su independencia, el Arzobispo Castrense de la nación norteamericana, Mons. Timothy P. Broglio recordó que los estadounidenses deben recordar los principios fundacionales del país y que, efectivamente, "somos una nación bajo Dios".
"El aniversario de la nación nos remite a lo que nos hace un gran país al tiempo que debemos recordar que somos, efectivamente, 'una nación bajo Dios'".
"El día de la independencia es una ocasión para picnics y desfiles, diversión familiar y fuegos artificiales, pero nunca debemos olvidar que la libertad tiene un alto precio", dijo el Prelado en una declaración en ocasión del 4 de julio.
Tras saludar a los soldados estadounidenses que sirven a la nación en el país y en el exterior, el Arzobispo afirmó que los Padres fundadores de Estados Unidos "reconocían la importancia de trabajar juntos para construir una nueva nación: una nación fundada en los principios y centrada en la esencia de lo que significa ser humano, creado a imagen de Dios Todopoderoso, con los derechos inalienables a la vida, la libertad y la felicidad".
"Preservar nuestro estilo de vida exige vigilancia, valor, respeto por la consciencia y victoria para vencer a las fuerzas del mal que quieren exterminar los valores que atesoramos".
Mons. Broglio dijo en su declaración que "tenemos que reconocer nuestra deuda a estos valientes hombres y mujeres (de las fuerzas armadas) cuyo compromiso y coraje nos permite ser libres".