LIMA,
El Obispo de Chimbote, en la región de Ancash (Perú), Mons. Ángel Francisco Simón Piorno, rechazó las acusaciones realizadas por la prensa local de formar parte de una red de corrupción y pidió a las autoridades esclarecer el caso en el que se encuentran involucradas altas autoridades del gobierno de la zona.
En un informe difundido el 25 de mayo, un medio de comunicación relacionó al Obispo de Chimbote con la mafia presuntamente encabezada por el presidente regional de Ancash, César Álvarez.
La relación atribuida por el medio de prensa se debía a que el Prelado, al igual que otras autoridades locales, envió una carta al gobierno central, pidiendo la ejecución de un proyecto de irrigación para la región, durante el gobierno del ex presidente Alan García.
Este proyecto terminó, por decisión del gobierno central, en manos de César Álvarez, actualmente con prisión preventiva y que es investigado por la justicia peruana por presuntamente dirigir una red mafiosa profundamente extendida en diversos ámbitos del gobierno local y central. El presidente de la región Ancash también es acusado de contratar sicarios para asesinar a un líder opositor.
Mons. Ángel Francisco Simón Piorno respondió el 26 de mayo a las acusaciones difundidas el día anterior y expresó su indignación.
"Cómo no voy a estar indignado. Qué vergüenza, Dios mío, qué vergüenza. ¿A quién quieren involucrar? ¿Al Papa también? He sido el más golpeado de toda la ciudad por parte de toda la corrupción y encima ahora resulta que soy operador de la corrupción. ¡Qué vergüenza!".