VATICANO,
Al presidir hoy el tradicional Vía Crucis por Viernes Santo en el Coliseo de Roma, el Papa Francisco subrayó que "Dios ha puesto en la Cruz de Jesús todo el peso de nuestros pecados", por lo que ahí "vemos casi hasta tocar con las manos cuánto somos amados eternamente".
A continuación, el texto completo de las palabras del Papa Francisco al presidir el Vía Crucis por Viernes Santo:
Dios ha puesto en la Cruz de Jesús todo el peso de nuestros pecados, todas las injusticias perpetradas por Caín contra su hermano, toda la amargura de la traición de Judas y de Pedro, toda la vanidad de los prepotentes, toda la arrogancia de los falsos amigos.
Era una cruz pesada, como la noche de las personas abandonadas, pesada como la muerte de las personas queridas, pesada porque resume toda la fealdad del mal.
Y sin embargo es con todo una cruz gloriosa, como el alba de una noche larga, porque representa todo el amor de Dios, que es más grande que nuestras iniquidades y nuestras traiciones.
En la cruz vemos la monstruosidad del hombre cuando se deja guiar por el mal, pero vemos también la inmensidad de la misericordia de Dios, que no nos trata según nuestros pecados, sino según su misericordia.