BUENOS AIRES,
La madrugada del domingo 13 de abril unos delincuentes ingresaron a la capilla Cristo Rey, dependiente de la parroquia San Cayetano, en Paraná (Argentina), para robar el Santísimo Sacramento y las hostias consagradas que se guardaban bajo llave en el sagrario, además de ocasionar diversos destrozos.
El Arzobispo de Paraná, Mons. Juan Alberto Puiggari, junto con el párroco, P. Miguel Guarascio, convocaron a los fieles a los actos en desagravio y reparación por este hecho que no sólo llena de dolor, sino que también afecta a los sentimientos más nobles de los fieles.
El Arzobispado señaló que la comunidad está "profundamente dolida y consternada" por este acto de profanación de la Eucaristía, "que constituye el tesoro más grande de la Iglesia en el que se venera la presencia real del cuerpo y la sangre de Nuestro Señor Jesucristo".
En horas de la tarde, la policía halló elementos que fueran sacados del templo. "No dejemos de rezar en desagravio y reparación por los hechos sucedidos", expresaron desde la comunidad.
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