CARACAS,
La Presidencia de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), consideró "oportuna y de gran valor" una participación de la Santa Sede como mediadora entre el régimen de Nicolás Maduro y la oposición a fin de solucionar la actual crisis que desde principios de febrero vive el país y que, a causa de la represión, ya generó 39 muertos y cerca de 500 heridos.
"Consideramos oportuna y de gran valor la participación de la Santa Sede en el diálogo entre el Gobierno y la oposición. El pueblo venezolano apreciará en sumo grado dicha participación y sabrá reconocer el valioso aporte de la Iglesia", afirmó Mons. Diego Padrón, Presidente de la CEV al leer un comunicado de los obispos.
Durante la conferencia de prensa, el Prelado advirtió al régimen que la represión no es el camino para resolver la crisis que todos los días lleva a miles de personas a las calles, sino "el diálogo sincero del Gobierno con todos los sectores del país, con una agenda previa y condiciones de igualdad y con gestos concretos evaluables en el tiempo como señales de la necesaria rectificación".
En ese sentido, los obispos llamaron a todos los venezolanos, especialmente al Gobierno y la oposición "a considerar la extrema gravedad del momento presente y evitar que el país se siga desangrando y se derrumbe por la violencia".
"Los exhortamos al diálogo y a poner todo su esfuerzo por construir nuevas relaciones basadas en el mutuo reconocimiento, la reconciliación y la búsqueda de la normalización de la situación nacional". "Una comisión de la verdad que sea plural y que genere confianza en los ciudadanos puede ser una gran ayuda", afirmaron.
Asimismo, recordaron a los fieles su deber de involucrarse a favor de la defensa de la vida, los derechos humanos, la libertad y la democracia. "Nadie que viva en Venezuela debe decir que no le interesa o preocupa la violencia y las muertes que están aconteciendo en ciudades y pueblos. Todos, sin excepción, somos responsables de la libertad, la paz y el destino democrático de nuestra Patria", señalaron.