Piura,
Frente a una multitud de 50 mil personas que marcharon por la defensa del derecho a la vida, ayer el Arzobispo de Piura (Perú) y Presidente de la Comisión para la Familia y la Defensa de la Vida de la Conferencia Episcopal Peruana, Mons. José Antonio Eguren, pidió a la ministra de Salud, Midori De Habich, que no ceda a las presiones para abrir las puertas al aborto en el país.
Mons. José Antonio Eguren advirtió que "el Gobierno Peruano estaría cediendo a presiones internacionales haciendo que el Perú abdique de su soberanía, esa que con tanto ardor y justicia ha defendido en La Haya, pronunciándose así en contra del ordenamiento constitucional y legal que protege al niño desde la concepción, ya que en nuestro país, 'el concebido es sujeto de derecho en todo cuanto le favorece'".
"Recientemente la Ministra de Salud ha anunciado que en el primer semestre de este año se aprobará el Protocolo o Guía de Aborto Terapéutico en el Perú. A su vez el Ministerio de Justicia ha dado un equivocado sustento legal para hacer viable esta norma que aprobaría por primera vez el aborto en nuestra Patria, diciendo sorprendentemente que 'es una obligación internacional'".
Mons. Eguren dijo que "con todo respeto le pedimos al Gobierno, que enarboló las banderas del nacionalismo, de la familia y de la inclusión social durante su campaña electoral, que no ceda ahora nuestra soberanía ante la presión de organismos internacionales altamente ideologizados en confabulación con minúsculos grupos de presión nacionales, y que no excluya a los peruanos más indefensos de todos como son los Niños por Nacer".
"La Beata Madre Teresa de Calcuta afirmaba: 'El gobierno que acepta el aborto no está enseñando a su pueblo a amar sino a aplicar la violencia para conseguir lo que se quiere. Es por esto que el mayor destructor del amor y la paz es el aborto'".
El aborto mal llamado "terapéutico", recordó el Arzobispo de Piura, "no cura nada y más bien mata una vida inocente y añade en la mujer el trauma y la herida imborrable del aborto".