MADRID,
El pasado 11 de marzo se cumplieron 100 años del nacimiento del Obispo Álvaro del Portillo, primer sucesor de san Josemaría Escrivá al frente del Opus Dei, que será beatificado el próximo 27 de septiembre en Madrid.
En varias ciudades de España se celebraron eucaristías en recuerdo del que fue primer Prelado del Opus Dei. En Roma, donde falleció el futuro beato en 1994, está teniendo lugar un congreso internacional sobre su figura.
Álvaro del Portillo era Doctor en Ingeniería de Caminos, en Filosofía y en Derecho Canónico. Se ordenó sacerdote en 1944, con 30 años de edad. Fue consultor de varios dicasterios de la curia romana y participó en el Concilio Vaticano II, participó como secretario de la comisión que elaboró el decreto Presbyterorum Ordinis, sobre el ministerio y la vida de los presbíteros.
El periodista Salvador Bernal, uno de sus principales biógrafos ha destacado que Mons. del Portillo "fue un hombre de paz aun en medio de graves dificultades, con una personalidad afable y firme, leal y paciente, exigente y recia, llena de valentía y audacia, de exigencia consigo y comprensión hacia los demás".
Algo que también se destaca en el Decreto de virtudes de la Congregación de las Causas de los Santos en la que se subraya su "fidelidad indiscutible a la Iglesia y al Papa".
Durante este centenario se recordará especialmente la acción de Mons. del Portillo como impulsor de iniciativas sociales y educativas. Por eso durante todo el año 2014, África estará presente a través del respaldo a tres proyectos de la ONG Harambee: un centro de atención materno infantil en Enugu (Nigeria), tres centros de salud de atención familiar en el Congo, y un programa contra la desnutrición infantil en Costa de Marfil.