SYDNEY,
Los esposos Renee Young y Howie Simon atraviesan el momento más difícil de su vida. El hijo que esperan nacerá con graves malformaciones pues tiene dos caras y dos cerebros, sin embargo, están dispuestos a proteger su vida y no aceptan el aborto que los médicos les propusieron.
El bebé, de 19 semanas de gestación, presenta diprosopus, una forma extrema de siameses que solo se ha registrado 35 veces en todo el mundo. Su hijo ha desarrollado un solo cuerpo, un cráneo de doble bóveda y dos caras con una duplicación exacta de los ojos, nariz y boca.
En declaraciones al programa de TV australiano "A Current Affair", la pareja explicó que no abortará porque para ellos "sería lo mismo que llevar a casa a un niño con autismo o síndrome de Down", además no comparten "la idea de acabar con la vida de un bebé que está sano y crece bien" pese a la grave malformación.
A través de una ecografía tridimensional se puede ver que el bebé tiene un solo corazón, todos sus órganos vitales, dos piernas, dos brazos y un solo cuerpo.
La pareja quien dijo tener fuertes razones "morales" para proteger la vida de su hijo y aseguran lo protegerán sin importar su apariencia física.
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