BUENOS AIRES,
Luego del trágico incendio en una planta de almacenamiento que cobró la vida de seis bomberos en la localidad de Barracas en Buenos Aires (Argentina), los familiares, compañeros y amigos de las víctimas se reunieron esta madrugada en el cuartel central de la Policía Federal para despedirse y elevar oraciones por sus almas.
En el responso religioso, el Capellán General de la Policía Federal, P. Diego de Campos, reflexionó sobre una frase que dijera un compañero de los difuntos: "Lo único que nos queda ahora es rezar".
El presbítero animó a los presentes a pedir al Cielo por quienes ofrendaron sus vidas en favor de los demás, como así también para que se le conceda el consuelo y la paz en el corazón de sus familiares.
El Arzobispo de Buenos Aires y Primado de la Argentina, Mons. Mario Aurelio Poli reza el responso durante el acto de inhumación de los restos de los efectivos caídos en servicio.
Los bomberos fallecidos son Leonardo Day, Maximiliano Martínez, Anahí Garnica, Damián Veliz, Juan Matías Monticelli y Eduardo Conesa, y fueron despedidos con honores en el Salón Dorado de la Policía Federal.
También fallecieron en el incendio el bombero voluntario, Sebastián Campos, y los rescatistas Pedro Barícola y José Méndez, integrantes de Defensa Civil de la Ciudad de Buenos Aires.