VALENCIA,
El Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, Mons. Gerhard Müller, afirmó recientemente en España que el Papa "es el fundamento, la piedra de la unidad de la Iglesia que Cristo fundó sobre Pedro", y destacó en el caso de Francisco, su capacidad de acercarse a los corazones de las personas sin hacer distinciones.
En declaraciones a la revista Paraula, la autoridad vaticana, que será creado cardenal el 22 de febrero, recordó que "el Concilio Vaticano II dice que todos los Obispos deben estar unidos al Papa considerándolo como el centro, el principio fundamental de la unidad de la Iglesia. Y tienen que gobernar toda la Iglesia, las particulares y las diócesis pero siempre siendo una unidad, no sólo una conexión, una suma de Iglesias locales. La Iglesia única la confesamos en el Credo y se hace presente en las iglesias locales, en las diócesis.
"Todos los Obispos tienen una responsabilidad universal para ser guiados por el Papa, ya que él es el 'encarnado' en Jesucristo como el principio central de la unidad de la Iglesia. Y todo esto hoy, en la era de la globalización y de los medios de comunicación social, es más fácil realizar esta colegialidad de los obispos con Pedro. Bajo la guía del Papa forman una unidad colegial. Pero el Papa, no es el 'primero entre iguales', él es el fundamento, la piedra de la unidad de la Iglesia que Cristo fundó sobre Pedro y su único sucesor es el Obispo de Roma", añadió.
El Prefecto, quien pronunció en la Universidad Católica de Valencia la conferencia "Colegialidad y ejercicio de la potestad suprema de la Iglesia", explicó durante la entrevista que su dicasterio, además de desarrollar perspectivas sobre las interpretaciones auténticas del Concilio Vaticano II con el próximo aniversario de la reforma protestante el año 2017, están trabajando en "formular los principios básicos de la catolicidad, para decir lo que es católico, la encarnación de la sacramentalidad"
Asimismo, destacó los próximos sínodos sobre el matrimonio y la familia, "porque son temas dogmáticos que tienen que ver con la Doctrina de la Iglesia, fe como fundamento de la vida humana, importante para la vida conyugal y la familia. No sólo del derecho canónico sino también de la doctrina de la dogmática", ha explicado.
Sobre el desarrollo del Concilio Vaticano II, aseguró que este "ha formulado la doctrina sobre la Iglesia, y esto vale dogmáticamente para siempre. Es como en nuestra vida cristiana. Somos bautizados pero necesitamos siempre una renovación de nuestro estilo de vida cristiana para no sólo ser cristiano de 'papel' sino ser cristiano en cuerpo y alma".