PANAMÁ,
Ayer domingo 24 de noviembre y al celebrarse la Solemnidad de Cristo Rey del Universo, el Arzobispo de Panamá (Panamá), Mons. José Domingo Ulloa Mendieta, hizo un llamado para que todos "hagamos actos concretos para que esta tendencia a la brutalidad en contra de nuestros niños y jóvenes llegue a su fin".
El llamado efectuado por el Arzobispo lo hizo recordando la lección de Martin Luther King: "en el centro de la no violencia se encuentra el principio del amor".
Según señala el Consejo de Medios de Comunicación de la Conferencia Episcopal Panameña, el Prelado recordó a figuras como Gandhi y Nelson Mandela, grandes líderes de la no violencia, quienes fueron capaces de encabezar movimientos pacíficos: uno logró cambios sociales ante el Reino Unido y el otro pudo abolir el apartheid en Sudáfrica.
El Arzobispo fue enfático en la necesidad de "romper con ese círculo nefasto de la violencia". "No podemos acostumbrarnos jamás a la violencia en ninguna de sus formas" dijo, y agregó que es hora de cultivar y promover la cultura de paz, solo así "encontraremos el rumbo para construir un país sin violencia, sin mujeres, sin niños y juventud maltratada".
"Hay que erradicar este mal que inclusive se ha dado en el propio hogar, y por eso tenemos que esforzarnos por fortalecer la familia, porque si hay una familia sana tendremos una sociedad sana, donde no exista el maltrato ni la violencia", afirmó Mons. Ulloa.
De manera especial, el Arzobispo se refirió al signo de unidad manifestado con la presencia de las diferentes confesiones para lograr una niñez y una juventud sin violencia. Recalcó que esto es expresión de que es posible encontrar puntos comunes para trabajar por el bien de nuestro país "porque podemos ser distintos pero no estar distantes".