BOGOTÁ,
Con Misas y cadenas de oración los colombianos rezan por la recuperación de "Milagros", una bebé de 26 semanas de gestación que fue declarada muerta a los 35 minutos de nacer y tras diez horas en la morgue revivió ante el asombro de los médicos.
"¡Es un milagro por donde usted lo vea!", exclamó el Dr. Farid Vieira, Gerente del Hospital San Francisco de Asís en Quibdó (Colombia), quien detalló a los medios que la bebé permaneció "prácticamente a la intemperie más de 10 horas en una morgue, sin ningún cuidado" y en una pequeña caja.
El martes 12 de noviembre, Jenny Adriana Hurtado (28), de la región rural del departamento del Chocó, ingresó al hospital. Debido a su corto tiempo de gestación Milagros nació por cesárea "con bastante dificultad respiratoria por la falta de madurez pulmonar" y a pesar de los esfuerzos de los médicos para que no naciera aún, explicó Vieira.
Los médicos hicieron todo lo posible para salvarla pero a los 35 minutos decretaron su deceso y su cuerpo aparentemente "sin vida" fue trasladado a la morgue del hospital.
Vieira señaló que "a las 13:30 de la tarde del miércoles llegaron los familiares a reclamar el cuerpo. El encargado de entregar el cadáver observó que la niña tuvo un movimiento, abrió los ojos y empezó a llorar". De inmediato fue trasladada a una incubadora.
El Hospital no contaba con lo necesario para atender el caso y por ello trasladó a Milagros horas más tarde a la Clínica Santa Teresita del Niño Jesús, especializada en el cuidado intensivo neonatal, al oeste de la ciudad de Bogotá.
En declaraciones para ACI Prensa, la sub gerente de la Clínica Santa Teresita, Clemencia Castro, señaló que la bebé ingresó a la unidad de cuidados intensivos con respiración limitada y riesgo infeccioso, por lo que fue inmediatamente asistida con respiración artificial y su pronóstico es reservado.
Según los médicos su estado "es inestable, complicado, el riesgo de muerte es inminente, es un paciente difícil de mucho cuidado, y se está haciendo todo lo posible para mantenerla estable".
Castro contó que desde que Milagros ingresó a la Clínica, muchas personas han manifestado su preocupación no sólo material a través de una colaboración del cuidado de la niña considerando que es de escasos recursos, sino también espiritual.
"El viernes la niña fue bautizada" en la clínica y la comunidad de Misioneras Teresianas que trabaja en la clínica ha elevado oraciones y celebrado Misas por la niña. El grupo de oración que la clínica ha pedido de manera especial por ella.
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