VATICANO,
El Papa Francisco señaló, hablando sobre la importancia de los medios de comunicación en el mundo actual, que "hace falta una gran responsabilidad, una gran capacidad de leer la realidad en clave espiritual" para poder entender a la Iglesia.
En un mensaje escrito a Mons. Edoardo Viganó, Director del Centro Televisivo Vaticano (CTV) con motivo del congreso con el que celebran los 30 años de esta televisora, el Santo Padre recordó su encuentro con los periodista el pasado 16 de marzo, apenas tres días después de su elección, y señaló que el papel de los medios de comunicación "ha ido creciendo en los últimos tiempos hasta volverse indispensable para narrar al mundo los hechos de la historia contemporánea".
El Papa resaltó que "todo esto se refleja también en la vida de la Iglesia. Pero si ya no es fácil relatar los eventos de la historia, todavía es más complejo narrar los vinculados con la Iglesia... Hace falta una responsabilidad particular, una gran capacidad de leer la realidad en clave espiritual. Efectivamente, los acontecimientos de la Iglesia tienen una característica especial:obedecen a una lógica que no es, principalmente, la de las categorías, por así decir, mundanas y, precisamente por eso, no es fácil interpretarlos y comunicarlos a un público vasto y variado".
El Santo Padre le recordó al CTV que "vuestro trabajo es un servicio al Evangelio y a la Iglesia" que también celebra los 50 años de la aprobación del decreto conciliar "Inter Mirifica" que "incluye entre los maravillosos dones de Dios a los instrumentos de comunicación social, entre ellos la televisión".
"En estas décadas - escribe el Papa - la tecnología ha viajado a gran velocidad, creando redes de conexión inesperadas. Es necesario mantener la perspectiva evangélica en esta especie de autopista global de la comunicación". De ahí, que " a la hora de presentar los acontecimientos vuestra óptica nunca pueda ser 'mundana', sino eclesial".
El Papa Francisco resaltó además que el CTV no desempeña "una función puramente documental, 'neutral' de los acontecimientos, sino que contribuye a acercar la Iglesia al mundo, anulando las distancias, haciendo llegar la palabra del Papa a millones de católicos, incluso allí donde profesar la fe, a menudo, es una decisión valiente".