VATICANO,
Hoy, 1 de octubre, se celebra el Día Mundial del Anciano y, el Pontificio Consejo para los Agentes Sanitarios (Pastoral de la Salud) se suma a esta celebración con un mensaje de su presidente, Monseñor Zygmunt Zimowski: "El valor de la vida de la persona anciana".
El Prelado señala en su mensaje que "esta jornada internacional constituye una ocasión importante, destinada a asumir un relieve cada vez más grande, también porque se calcula que en todo el mundo hay, en estos momentos, 600 millones de ancianos y debido al progresivo envejecimiento de la población dentro de una década podría haber en el planeta unos mil millones de personas ancianas".
"Por eso todos, los cristianos y las personas de buena voluntad, estamos llamados a colaborar para que la sociedad sea más justa y equitativa y se enriquezca con la participación efectiva de los que podrían ser considerados como "no útiles" o incluso "un peso", y que, en cambio, pueden aportar una contribución gracias a la experiencia y la sabiduría que han adquirido a lo largo de la vida".
En muchas sociedades de los países, "ricos", conseguir que el anciano sea y continúe siendo "coprotagonista" de la vida social comporta hacer frente a la prolongación de la vida, debido a varios factores, entre ellos los conocimientos en los sectores médicos y científicos.
Pero "una prolongación no puede ser solo un tiempo de supervivencia; hay que valorizarla con respeto y propiedad, siguiendo la voluntad y las características de la persona anciana y del contexto al que pertenece", prosigue el Arzobispo.
La solidaridad entre jóvenes y ancianos lleva a la comprensión de que la Iglesia es "la familia de todas las generaciones, en la que todos tienen que sentirse como en casa y no reina la lógica del beneficio y del tener, sino la de la gratuidad y del amor. Cuando en la vejez, la vida se vuelve frágil, no pierde nunca ni su valor ni su dignidad: cada uno es amado por Dios, cada uno es importante y necesario. En esa perspectiva se inserta una pastoral específica que tiene, como elemento fundamental, la comunión entre generaciones".