MÉXICO D.F.,
Mons. Jorge Carlos Patrón Wong, hasta ahora Obispo de Papantla en México, compartió su sentir sobre su nueva misión como Secretario de la Congregación para el Clero, de los Seminarios. El Prelado viajará a finales de noviembre al Vaticano para asumir su nuevo cargo y dijo que compartirá a través de las redes las cosas positivas de todos los seminarios del mundo.
Mons, Patrón tiene más de 5 mil 800 seguidores en la red social Twitter, siendo conocido como el Obispo "tuitero". Señaló que "los jóvenes me enseñaron a usarlas (las redes sociales) y es un regalo de Dios" y así a través de mensajes puede mantener informados y orientar a sus feligreses.
Para el Arzobispo "las redes sociales son un medio maravilloso para comunicar las acciones buenas de la Iglesia y ahora me servirán para compartir cosas positivas de todos los seminarios del mundo, los progresos, esperanzas, para que las personas aprendan a amar más nuestros seminarios y a colaborar con ellos".
La nueva tarea de Mons. Patrón, será atender la congregación que se encarga de instituir sacerdotes y atender a unos 120 mil seminaristas en todo el mundo, será "un trabajo gigante".
El ahora Arzobispo, tiene más de 16 años de experiencia con los seminario, señaló que "nunca en mi vida imaginé ejercer un servicio eclesial de esta magnitud (...), estar cerca del Santo Padre, trabajar junto a él" y resaltó que este nombramiento no es para él sino para toda la Iglesia de México.
"Yo sólo puedo estar agradecido con Dios y con el Papa de que me encomienden seguir amando y sirviendo a la Iglesia, especialmente en algo tan hermoso como son los seminarios y las vocaciones sacerdotales en todo el mundo", declaró el Prelado para el Sistema Informativo de la Arquidiócesis de México (SIAME).
Mons. Patrón en esta nueva misión para la Iglesia, tiene como prioridad impulsar que los seminarios sean verdaderas casas de vocación para formar sacerdotes cercanos a Dios y a los demás, a través de una transformación humana, espiritual e intelectual de forma personalizada.
Esto implicará también un trabajo con los formadores "porque cuando ellos aman esta vocación particular se siente un cambio radical de vivencia, un ambiente y una respuesta vocacional a Dios", resaltó.
El Arzobispo señaló también que él no buscó o hizo algo para llegar a ese puesto, por tanto lo acepta como un "regalo de Dios, como una demostración de su amor misericordioso a un pecador, estoy muy agradecido y desde esa gratitud a Dios vamos a responder".
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