CARACAS,
El Párroco de la Iglesia La Caridad del Cobre en Santa Paula, Caracas (Venezuela), Padre Manuel Díaz Álvarez, fue golpeado y amordazado por unos delincuentes que habían ingresado a la casa parroquial a robar las ofrendas en efectivo de los fieles y otras pertenencias.
Al terminar la Misa de las 6:00 p.m., el presbítero se dirigió hacia la casa parroquial y al ingresar se encontró a otro de los sacerdotes amordazado, siendo en ese momento golpeado en la cabeza y también fue atado y amordazado mientras los malhechores continuaban robando el dinero tanto en moneda local (bolívares) y extranjera (dólares), que los fieles donan para el sustento de la casa, así como la colecta de ese domingo.
Los delincuentes se llevaron además la camioneta de uso pastoral, documentos, tarjetas de crédito, chequeras y las llaves de la casa.
Según informó el diario El Universal, la División contra Robos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) del país, ya comenzó con las investigaciones tras recibir la denuncia.
Según señala la oficina de prensa de la Conferencia Episcopal Venezolana, el Padre Eduardo Campagnuolo, comentó que "fue un momento difícil, muy amargo, ellos (los delincuentes) tenían unos hierros con ganchos con los cuales destrozaron parte de la casa y con eso nos amenazaban continuamente".
Cuando los asaltantes, se fueron el P. Manuel Díaz Álvarez pudo zafarse y ayudar a sus compañeros. Notificaron a la Policía y luego fue a celebrar la última misa dominical, y al terminar informó a los feligreses lo que les había sucedido.