CARACAS,
El Arzobispo de Caracas (Venezuela), Cardenal Jorge Urosa Savino, presidió el sábado la jornada de oración y ayuno por la paz en Siria, Medio Oriente y el mundo; y pidió también el cese de la violencia física y política en el país sudamericano, donde quienes detentan el poder tienen mayor responsabilidad.
"Los que detentan el poder tienen un mayor compromiso de trabajar por la paz en Venezuela" señaló el Purpurado desde la Basílica Santa Teresa, donde advirtió que "en el país mueren más personas por la violencia que por algunos conflictos bélicos".
El periodista Ramón Antonio Pérez informó que el Cardenal también dijo que el llamado a la paz se dirige a todos los venezolanos.
"Los que detentan el poder tienen un mayor compromiso de trabajar por la paz en Venezuela", dijo el Purpurado y pidió se detuviera "la violencia contra los niños, contra los indigentes, contra la mujer, contra ciudadanos de cualquier tipo, incluso funcionarios de seguridad del Estado".
También mencionó el caso de Víctor Manuel García, "que dio declaraciones el 12 de abril, lo vienen a imputar cuando ya una Ley de Amnistía había cubierto esos delitos, o en todo caso debería ser juzgado en libertad".
Denunció además el caso del periodista Leocenis García que "está siendo juzgado y ahora el expediente está en reserva y los abogados no saben de qué lo están acusando", expresó.
"Eso es violencia política, esa agresividad (...) la que se practica por el mal uso de las leyes contra las personas a las que no se le somete a un debido proceso", denunció.
Durante la celebración, el Arzobispo también felicitó a Mons. Prieto Parolin por su nombramiento como Secretario de Estado en el Vaticano.
Importancia de los laicos
Antes del inicio de la jornada, el aún Nuncio en Venezuela y recientemente nombrado Secretario de Estado del Vaticano, Mons. Pietro Parolin, conversó brevemente con los periodistas, con quienes destacó la importancia del laicado en Venezuela, el cual "representa una gran fuerza que trabaja por la misión de la Iglesia, bien sea a título personal o en movimientos organizados".
"Es un patrimonio muy precioso y les pido que se lancen a la arena de la vida diaria: en la política, en la cultura, en los medios de comunicación. Allí donde los hombres viven, trabajan, luchan, sufren y gozan", indicó.
En este sentido, el Arzobispo recordó que en los lineamientos del Concilio Plenario Venezolano se llama a los laicos a "saber poner la levadura del Evangelio; ser sal y luz de esta sociedad venezolana, porque el laicado venezolano debe decir una palabra fundamental para resolver los problemas de este país".
(Actualizado a las 10:02 a.m. GMT-5)